Según los ecologistas, la caza no puede ser una actividad esencial y no se justifica por el daño de los conejos a los cultivos

A pesar del confinamiento obligatorio por la crisis sanitaria del coronavirus, la Junta de Castilla-La Mancha autorizará desde este lunes la caza de conejos en las comarcas afectadas por la plaga de este mamífero –un total de 290 municipios- y volverán a escucharse disparos de escopeta en campos que llevan más de un mes sin presencia humana. Castilla-La Mancha no es la única comunidad que autorizará estas cacerías. Aragón prepara una orden similar y en La Rioja y Navarra se permite abatir conejos a guardas forestales y guardas rurales de coto en la primera región y a brigadas de Medio Ambiente de la Policía Foral en la segunda comunidad.

En el caso de la comunidad castellano-manchega, así consta en una resolución de la Consejería de Desarrollo Sostenible que este lunes se publicará en el Diario Oficial de la región y que la Federación de Caza de esta comunidad aplaude al entender que «va a dar respuesta a un problema social que han venido denunciando organizaciones agrarias por los daños importantes que el conejo de monte está causando en cultivos agrícolas».

Con condiciones

No obstante, los cazadores – el vigilante del coto, un agricultor o una tercera persona autorizada por el agricultor- deberán cumplir una serie de requisitos. Así, sólo podrán realizar estos controles cinegéticos un máximo de dos personas, que se desplazarán en coche, una delante y otra detrás. Además, tendrán que mantener una distancia entre ambas de al menos un metro, portar un certificado de actividad y desinfectar los equipos de trabajo y los vehículos una vez finalizada la cacería.

Pero este permiso, que se extenderá hasta el 8 de febrero de 2021, no convence a los ecologistas, quienes restan importancia a los daños ocasionados por la plaga de conejos «porque la abundancia de lluvias está permitiendo a los conejos alimentarse de la vegetación natural que está proliferando», según Miguel Ángel Hernández, de Ecologistas en Acción.

Fuente hoy.es